“Que se xerrin”

Irene nos planteó un reto: crear una identidad de marca para su taller Mostaza, que a su vez tuviera una conexión estética con su marca personal, Irene Forteza Alomar.

“Vull que se xerrin”, nos decía en relación a sus dos proyectos. Así que definimos una paleta de colores cálidos, que evoca sus lazos con la naturaleza, y una tipografía de trazos simples que fuera común para ambas marcas.

Con este punto de partida, empezamos por la identidad de Mostaza para que el taller pudiera abrir sus puertas lo antes posible.

La belleza de las imperfecciones

La personalidad de Irene tenía que plasmarse en la imagen del taller, eso lo teníamos claro. Por eso, partimos de algunas de sus piezas de cerámica más icónicas y creamos ilustraciones con detalles de color mostaza. Luego reflejamos las pequeñas imperfecciones de la cerámica artesanal mediante trazos asimétricos y notas de color que se salen de los bordes. Finalmente, añadimos una tipografía minimalista con grandes espaciados para aportar armonía al conjunto.

Todo ello lo adaptamos a un logotipo principal y variantes, diseño de tarjetas de visita y otros elementos de papelería básica, así como un vale de regalo para sus cursos y un cartel DIN A3 para el taller.

¡Y el taller levantó su persiana!

En marzo de 2021, Irene abrió las puertas de su taller con la satisfacción de haber creado un espacio con mucha personalidad, que se refleja en su imagen alegre y original.